Isla Holbox

Aquí se mezclan las aguas del Golfo y el Caribe Mexicano, cálidas y transparentes, ideales para nadar junto al enorme tiburón ballena, cerca de lagunas costeras y selvas tropicales habitadas por cientos de aves.

Antiguo refugio del capitán Laffite, Francis Drake y Francisco de Molas, quienes llegaban a la isla para resguardarse de los temporales y abastecerse de agua dulce, Holbox fue asediado por muchos piratas durante los siglos XVIII y XIX.

Las crónicas y leyendas narradas por  los residentes locales, hacen alusión a varios sitios donde estos visitantes enterraron sus tesoros. No obstante, este apacible pueblo de pescadores con casi 2 mil habitantes, en su mayoría procedentes de Yucatán y Quintana Roo, -además de algunos nuevos residentes que como los antiguos bucaneros también proceden de Europa-, desde hace décadas ha sido reconocido por sus valientes pescadores y por  recibir de mayo a octubre, para aparearse, al tiburón ballena, especie tranquila e inofensiva para el ser humano.

Fusión de corrientes

Ubicada al noroeste del estado de Quintana Roo y de Cancún, la Isla Holbox, cuyo nombre significa hoyo o hueco negro, es el lugar de unión de las aguas del Golfo de México con las del Mar Caribe.

Isla alargada y angosta, de 43 kilómetros. de largo por 2 en su parte más ancha, puede recorrerse en menos de 2 horas en cuatrimotos o a bordo del  transporte típico del lugar, unos carritos parecidos a los usados en el golf, que se rentan por un poco más de 100 pesos la hora.

Este ambiente insular, está separado del norte continental de la Península de Yucatán por las aguas de la laguna Yalahau y posee un agradable clima tropical, con temperaturas promedio de 27ºC y precipitaciones de 1,500 mm. al año. Lo anterior, lo convierte en un destino ideal para disfrutar de sus playas bañadas por aguas cálidas, donde destacan atracadas decenas de lanchas adornadas con largos palos utilizados para la captura del pulpo endémico: Octopus maya.

Franjas de arena y sol

Por su extensión, la isla también puede ser recorrida a pie a través de una estrecha franja de fina arena, ideal para realizar  plácidas caminatas, tomar el sol explorando la costa en ambas direcciones.

El único lugar habitado es Holbox, una pequeña y pintoresca población que cuenta con todos los servicios necesarios (excepto bancos). Es un pueblo rústico, que todavía cuenta con algunas cabañas coloridas y casas de madera y palma, todas alineadas frente a calles limpias, rectas y piso de fina arena. Aquí, las actividades y la vida nocturna se desenvuelven con gran tranquilidad entre gente hospitalaria, con diferentes opciones para comer o cenar en agradables restaurantes que sirven los más deliciosos platillos preparados a base de pescados y mariscos frescos.

En los alrededores una buena opción es la Isla de Pájaros, un islote cubierto de manglares y algunos cactus y arbustos de la duna costera. En el lugar habitan decenas de especies de aves acuáticas como fragatas, pelícanos, cormoranes, y otras aves residentes y migratorias; también, durante otoño e invierno, aquí es posible admirar cientos de pelícanos blancos que vienen de Norteamérica, y en primavera disfrutar del espectáculo rosa que crean miles de flamencos. En su porción terrestre, encontramos cangrejos ermitaños, iguanas y lagartijas; mientras en las aguas poco profundas sobrevive un fósil viviente: el extraño cangrejo bayoneta. Otras opciones turísticas cercanas son los manantiales u ojos de agua que brotan del suelo plano, y un sitio más es el río Yalikín que atrae por sus vestigios arqueológicos mayas.

Enorme espectáculo

Sin embargo, el mayor espectáculo lo constituye el tiburón ballena, un pez de cuerpo alargado y robusto, de color gris oscuro con puntos blancos en el dorso y vientre blanco, con la cabeza plana terminada en una enorme boca llena de filosos dientes. Puede medir hasta 15 metros y pesar 18 toneladas; aunque es el pez más grande que habita en los mares, es muy tranquilo e inofensivo, por lo que, en la última década ha resultado satisfactorio nadar de manera controlada junto a este enorme tiburón, que visita durante varios meses estas cálidas aguas. Hoy, para conocer algunos aspectos de su biología e historia natural, varios centros académicos y de investigación como el Colegio de la Frontera Sur-Ecosur, la Universidad de Quintana Roo y el Tecnológico de Chetumal, realizan visitas y muestreos para su protección.

Como parte del Caribe Mexicano, frente a Holbox también se encuentra la extraordinaria barrera coralina que da origen al Gran Arrecife Maya, un espectáculo subacuático que ningún buzo debe perderse.

Hay que recordar que no hay que tocar los corales, los peces, las piedras ni nada que esté en el agua, ya que además de que pueden ser dañados, también ellos pueden hacer daño, pues algunos cuentan con puntas filosas no apreciables a simple vista. Tampoco hay sumergirse en el agua con objetos brillantes que puedan llamar la atención de barracudas y otros peces depredadores.

Aunque las playas son muy tranquilas, es importante no alejarse demasiado de su orilla, pues sorpresivamente se puede llegar a lo profundo, donde las corrientes son muy fuertes.

Área protegida

La isla Holbox, forma parte del Área de Protección de Flora y Fauna Yum Balam decretada el 6 de julio de 1994, donde ocupa una superficie de 154,052 hectàreas del municipio de Lázaro Cárdenas, en el extremo norte del estado. Está formada por terrenos nacionales, ejidales y de propiedad privada, que tienen como complemento varios sistemas lagunares junto a las aguas del Golfo. El área protegida posee extensas selvas y humedales que colindan con la Reserva de la Biosfera de Ría Lagartos; cuya ubicación y características, forman parte de la llanura costera del Atlántico Norte y posee una enorme diversidad biológica.

Esta área también cuenta con sitios arqueológicos, lo cual aumenta su importancia debido al acervo e historia maya heredados.

Cómo llegar:

Desde Cancún, tomar la carretera No. 180, llegar a Nuevo Xcan, de ahí seguir a Kantunilkín y después a Chiquilá  a 164 Km. de Cancún. A partir de ahí se toma el ferry para cruzar a la isla y pueblo de Holbox. También hay lanchas rápidas para cruzar. Hay servicio de autobuses y vuelos desde Cancún.

Qué hacer:

Pesca.  Este es un verdadero paraíso de sábalos y robalos, peces espada, barracudas, tarpones y palometas.

Todo el año se encuentran las mencionadas especies, aunque la mejor temporada de pesca comienza en el mes de abril y termina en septiembre. La Laguna de Yalahau es ideal  para la pesca con mosca o “fly fishing”.

Buceo y esnórquel. No hay que olvidar el visor y el esnórquel, porque en las aguas de cualquier playa de la isla, es posible observar gran variedad de especies acuáticas.